"Como te ven, te tratan"
En el ámbito de la prevención de riesgos, la percepción es un factor crucial. Tal como decía una abuela a su nieta: "La gente te tratará según interprete tu apariencia". Este sabio consejo no solo aplica al plano personal, sino que también tiene profundas implicaciones en la gestión de la seguridad y salud en el trabajo, donde la imagen y las acciones coherentes son fundamentales para generar confianza y compromiso.
Liderazgo: un ejemplo a seguir en prevención
Los líderes en prevención de riesgos, ya sean gerentes, supervisores o Monitores de seguridad e higiene en el trabajo, tienen la responsabilidad de alinear lo que dicen con sus acciones. Un líder que habla de seguridad pero incumple normas básicas, como el uso de equipos de protección personal o la supervisión activa de procedimientos seguros, genera un efecto contraproducente en el trabajador, o un "GERENTE" que por ser la máxima autoridad NO quiere utilizar un casco en una zona de riesgo. Esa incongruencia minimiza la credibilidad y fomenta comportamientos inseguros entre los trabajadores.
De igual manera, en un entorno donde el liderazgo utiliza descalificaciones o mensajes negativos para abordar problemas, el clima laboral se deteriora. Como bien decía Hermann Hesse: "Cuando odiamos a alguien, odiamos en su imagen algo que está dentro de nosotros". En prevención, esto implica que un enfoque reactivo o punitivo en la gestión de riesgos puede generar resistencia, desmotivación y, a la larga, más incidentes.
Conclusión:
En la prevención de riesgos, la imagen no es superficial; es una herramienta clave para construir credibilidad, confianza y compromiso. La coherencia entre lo que decimos y hacemos es el cimiento de una cultura de seguridad sólida.
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